A dos cuadras del consultorio de Leonera, Guillermo Vera quién se encontraba caminando por el sector logró escuchar los quejidos del animal que provenían de un contenedor de basura “Decidimos acercarnos a ver qué pasaba, cuando vimos la cabeza de una perrita enterrada viva con sus patitas amarradas”.
Desde su Facebook alertó la situación comentando que al momento de sacarla y desatarle las patas, la perrita salió corriendo hacia una población aledaña con paradero desconocido.
“Lo más importante es que la salvamos de una muerte inminente en ese contenedor y tan sólo nos imaginamos que tipo de persona pudo haber hecho tal intento de asesinato hacia esa perrita, estamos contentos”. Comentó.
fuente:http://pachnews.cl